Los deberes del colegio, son hoy en día, uno de los grandes puntos de conflicto para muchas familias. Cada vez más, nos llegan a consulta madres y padres preocupados por saber si la ayuda que están ofreciendo a sus hijos/as es la correcta o angustiados porque el hecho de realizar los deberes genera un mal ambiente familiar. Sea cual sea el problema en sí, nos encontramos siempre, padres muy involucrados en las tareas de sus hijos/as, a veces, en exceso y muchos de ellos se acaban haciendo la misma pregunta; los deberes del colegio ¿responsabilidad de padres o de hijos?.
Para dar respuesta a esta y otras cuestiones, os dejamos algunos consejos que pueden seros de gran utilidad en vuestro día a día.
1.Ayudar no significa hacer. Si les ayudamos tanto que al final es como si les hiciésemos los deberes, nunca aprenderán a hacerlos ellos solos. Además, estaremos ofreciendo una visión errónea al profesorado, sobre los conocimientos adquiridos por nuestros hijos/as. Entonces, ¿no debemos ayudarles?, claro que se les puede ayudar, pero de una forma puntual, explicándoles dudas, dándoles pautas de cómo se deben hacer las cosas etc… y dejarles que lo hagan ellos solos.
2.Fomentar su responsabilidad y autonomía. En numerosas ocasiones he oído a padres preguntar: ¿Cuántos deberes tenemos?, ¿Qué tenemos que hacer para mañana?, ¿cómo nos ha salido el examen? etc.… Es importante que tanto padres como hijos/as aprendan que las tareas escolares son responsabilidad de estos últimos, y para conseguir esto, es necesario fomentar su autonomía:
-
- Uso de la agenda. Tienen que acostumbrarse a anotar los deberes, exámenes, trabajos….
- Planificar el estudio. Es necesario involucrar al niño/a en la organización y planificación de los deberes. De este modo, aprenderán con el tiempo a hacerlo ellos solos/as.
- Organizar su material. De la misma forma, es el niño/a el que debe preparar y preocuparse de llevar el material al colegio. Podemos revisar o recordarle, pero no es conveniente hacer por el/ella.
3.Trabajar su motivación. Los niños/as tienen que sentirse motivados, ya que, si no, de poco servirá todo lo demás, ¿y como conseguimos que estén motivados?:
-
- Reforzando sus logros y su esfuerzo: Hay que felicitarles y animales tanto si sacan una buena nota como si sus notas no han sido tan buenas, pero se han esforzado y trabajado. De esta manera, aumentaremos su autoconfianza y su autoestima.
- Si se utilizan los premios como refuerzos, estos deberán acordarse con el niño/a y deberán poder conseguirlo a corto plazo y estableciendo siempre metas realistas a conseguir. De lo contrario, conseguiremos el efecto contrario, es decir, desmotivar al niño/a.
- Establecer objetivos realistas, en función de las características, habilidades y situación del niño/a. Si tu hijo/a presenta alguna dificultad que afecta a su aprendizaje, será necesario tenerlo en cuenta a la hora de establecer los objetivos a conseguir.
Por otra parte, es necesario como padres y madres evitar comparaciones con otros niños/as de su clase o con sus hermanos/as por los resultados académicos o por la dificultad que les conlleva realizar las tareas. Cada niño/a es único, con sus virtudes y defectos y no es necesario recordarles estos últimos en cada momento.
También es necesario recordar, que no influye tanto el tiempo que se esté empleando en realizar las tareas escolares si no la calidad de ese tiempo. Es decir, hay niños/as que se pasan tardes enteras estudiando o haciendo deberes y los resultados académicos no acompañan. En estos casos, será necesario evaluar a que y como están empleando el tiempo o si pudiera existir algún tipo de dificultad que pudiera estar afectando a su aprendizaje.
Por último, es importante que los niños/as tengan un tiempo de ocio y descanso, a veces, la carga de deberes, exámenes y extraescolares es tal, que no tienen tiempo para jugar. Para algunos niños/as puede que esto no sea un problema, pero para otros resulta agotador y desmotivante, por ello es importante que puedan tener todos los días unos minutos para jugar.
En definitiva, se trata de tener en cuenta, las características de tu hijo/a, adaptando estas pautas a su situación y habilidades. Con el objetivo de conseguir establecer una rutina de trabajo que les haga mas responsables y autónomos.
Teniendo en cuenta que no todos los niños/as son iguales y que algunos tendrán mas dificultades que otros, siempre puedes acudir a un especialista que te ayude a abordar la situación cuando no sepas como actuar.
Si te ha interesado este artículo, te invito a que lo compartas en tus redes sociales y te recomiendo otros artículos que quizás puedan interesarte:
Deja tu comentario